Repercusiones de la violencia doméstica en los planes de paternidad y los divorcios en el Estado de Washington

Repercusiones de la violencia doméstica en los planes de paternidad y los divorcios en el Estado de Washington
 

Por Wendy Winfield, abogada de apoyo a la familia

La violencia doméstica es un problema generalizado que afecta significativamente a la dinámica familiar, en particular durante los divorcios y el establecimiento de planes de crianza. En el estado de Washington, como en muchas jurisdicciones, la presencia de violencia doméstica puede complicar los procedimientos judiciales e influir profundamente en las decisiones relativas a la custodia de los hijos, los derechos de visita y la seguridad general de la familia.

Marco jurídico

La ley del Estado de Washington reconoce los efectos perjudiciales de la violencia doméstica en las familias y tiene disposiciones específicas para abordar estas cuestiones en el contexto del divorcio y los planes de crianza. El Código Revisado de Washington (RCW) hace hincapié en la importancia de garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y los padres víctimas de violencia doméstica. En virtud del RCW 26.09.191(2)(a)(iii), se limitará el tiempo de residencia de un progenitor con el menor si se determina que el progenitor ha participado en un historial de actos de violencia doméstica, tal y como se define en el RCW 7.105.010. RCW 7.105.010(9) define la violencia doméstica como: Daño físico, lesiones corporales, asalto, o la imposición del temor de daño físico, lesiones corporales o asalto; conducta sexual no consensual o penetración sexual no consensual; control coercitivo; acoso ilegal; o acecho de una pareja íntima por otra pareja íntima o un miembro de la familia o del hogar por otro miembro de la familia o del hogar.

Repercusiones en los planes de paternidad

Cuando la violencia doméstica es un factor, la principal preocupación del tribunal es la seguridad de los niños y del progenitor victimizado. En los casos en que la violencia doméstica ha ocurrido o se sospecha, el tribunal puede ordenar protecciones tales como:

Órdenes de alejamiento y de protección: Emisión de órdenes de alejamiento y/o protección para impedir que el agresor contacte o se acerque a la víctima y a los hijos. Por lo general, las órdenes de protección son más protectoras que las órdenes de alejamiento.

Visitas supervisadas: Ordenar que las visitas con los hijos sean supervisadas por un profesional o un supervisor no profesional para garantizar la seguridad de los hijos durante sus visitas con el otro progenitor.

Limitación del tiempo de custodia: Restringir o limitar el tiempo de custodia del agresor si se considera inseguro para los niños o para el otro progenitor.

Modificaciones del plan de paternidad: Modificación de los planes de crianza existentes para dar cabida a las preocupaciones de seguridad, posiblemente incluyendo cambios en los horarios o lugares de visita.

Consideraciones judiciales

Durante los procedimientos de divorcio o al establecer los planes de crianza, el tribunal considera seriamente las pruebas de violencia doméstica. Esto incluye informes policiales, historiales médicos, declaraciones de testigos y testimonios de expertos, como terapeutas o Guardianes Ad Litems/Visitadores Judiciales, que pueden utilizarse para investigar cuestiones importantes para decidir el plan de crianza. Los tribunales suelen evaluar la naturaleza, frecuencia y gravedad de los malos tratos, así como cualquier antecedente de órdenes de protección o condenas penales relacionadas con la violencia doméstica.

Protección de las víctimas

La legislación del Estado de Washington pretende proteger a las víctimas de violencia doméstica ofreciéndoles recursos legales que den prioridad a la seguridad. Esto incluye disposiciones para órdenes de protección de emergencia y asistencia legal para ayudar a las víctimas a navegar por las complejidades de los procedimientos de divorcio y de planes de crianza.

Retos y consideraciones

A pesar de las protecciones legales, navegar por el sistema legal como víctima de violencia doméstica puede ser un reto. Las víctimas pueden tener dificultades para presentar pruebas, temer represalias por parte del agresor o tener dificultades económicas que limiten su acceso a la representación legal.

Conclusión

En el Estado de Washington, como en muchos otros lugares, el impacto de la violencia doméstica en los planes de crianza y los divorcios es profundo. El sistema legal se esfuerza por proteger a las víctimas y a sus hijos al tiempo que garantiza resultados justos y equitativos en los casos de divorcio y de planes de crianza. Al dar prioridad a la seguridad y considerar las circunstancias únicas de cada caso, los tribunales desempeñan un papel crucial en la mitigación de los efectos de la violencia doméstica en las familias. En última instancia, el objetivo es crear acuerdos de crianza que promuevan el bienestar de los niños y proporcionen un entorno seguro para todos los miembros de la familia involucrados.